Desde hace tiempo, el Consejo General de la Psicología (COP) ha venido insistiendo en la necesidad de diseñar e implementar una estrategia multidisciplinar y coordinada para la prevención del suicidio, un plan que ofrezca una respuesta integral y que dé cuenta de la naturaleza multicausal de los comportamientos suicidas. Por fin, esto ha empezado a dar sus frutos y, el pasado 14 de febrero de 2025, el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud ha aprobado el primer Plan de Acción para la Prevención del Suicidio 2025-2027.
El objetivo principal de este plan es reducir y prevenir la conducta suicida y, para ello, presta atención especial a los grupos en situación de vulnerabilidad (personas mayores, adolescentes, personas LGTBIQ+, personas en situación de exclusión social, personas con discapacidades…), ofreciendo apoyo, intensificando las redes de protección y sensibilizando a la sociedad para combatir el estigma asociado al suicidio.
Se pretende aumentar la vigilancia en salud mental, colaborar con medios para ofrecer información rigurosa, integrar la salud mental y la prevención del suicidio en las políticas públicas de ámbitos educativos, laborales, comunitarios y penitenciarios, mejorar la detección precoz en el campo sanitario y coordinar las diferentes Administraciones y sectores.

Fuente: Pixabay. Foto: Pixabay. Fecha: 18/02/2025.
Este plan de acción era urgente; basta con decir que, en el año 2023, se han producido en España 18.033 fallecimientos por causas externas, de ellos, 4.116 corresponden a casos de suicidio, es decir, el 23 %. Si bien es la primera vez que se reduce esta cifra desde 2018, continúa representando un número elevadísimo (llevaba 16 años siendo el principal motivo de muerte externa), y llamaba la atención la carencia de un plan de acción para reducir el número de muertes.
El COP siempre ha defendido que cualquier respuesta a un problema tan complejo debe, necesariamente, prestar atención a la prevención, la intervención y la posvención, considerando, al menos, la dimensión social, clínica y cultural de las conductas suicidas. En este contexto, una de las medidas más eficaces que ha venido planteando el COP es la incorporación de psicólogos clínicos en Atención Primaria, lo que facilitaría tanto la detección precoz como la prevención de este grave problema, en este primer nivel asistencial de la salud.
Por ello, aunque se celebra la aprobación de este plan, todavía queda mucho camino por recorrer. Por ejemplo, todavía no se ha aprobado un plan de acción para toda la salud mental, no solo para el suicidio. Y el Consejo General de Psicología seguirá insistiendo y promoviendo su aprobación, para beneficio de todos y todas, hasta que se logre su aprobación, como acaba de suceder con el plan de prevención del suicidio.
Consulta el Plan de Acción para la Prevención del Suicidio pinchando aquí.