Toda esta información, una vez analizada y contextualizada, debería ayudar a responsables políticos, asociaciones, profesionales y consumidores a la hora de tomar decisiones sobre estas cuestiones en sus respectivos ámbitos. A continuación, recogemos algunos de las principales conclusiones expuestas en el informe: Encuesta sobre Alcohol y drogas en población general en España (EDADES) 2020 Las drogas con mayor prevalencia de consumo en la población española de 15-64 años en los últimos 12 meses, continúan siendo el alcohol, el tabaco y los hipnosedantes con o sin receta, seguidos del cannabis y la cocaína. La edad de inicio en el consumo se mantiene estable. Las sustancias que se empiezan a consumir a una edad más temprana son el tabaco y el alcohol, seguidas del cannabis. La sustancia que se suele empezar a consumir a edades más tardías son los hipnosedantes y los analgésicos opioides. Las prevalencias de consumo son mayores en el grupo de 15 a 34 años, excepto en el caso de los hipnosedantes y los analgésicos opioides con o sin receta, donde las mayores prevalencias se observan en los grupos de edad más avanzada. Los datos evidencian un mayor consumo entre los hombres (excepto para los hipnosedantes y los opioides). Estas diferencias son aún mayores al observar los datos relativos al alcohol, el tabaco y el cannabis. Nuevamente, el alcohol se erige como la sustancia legal más consumida, manteniendo una tendencia estable en su prevalencia de consumo y en niveles altos desde la década de los noventa. No obstante, destaca una tendencia descendente de los bebedores diarios, que comenzó en 2001, alcanzó en 2018 el valor mínimo de toda la serie histórica y que se ha incrementado en más de un punto en 2020. Según las cifras, un 19,4% de los españoles y las españolas de 15 a 64 años se ha emborrachado durante el último año. Se aprecia que el consumo de alcohol de los alumnos de 14 a 18 años está directamente relacionado con el consumo de alcohol de sus madres y padres. Con respecto al consumo en atracón de alcohol (binge drinking), se mantiene la tendencia ascendente registrada desde 2007. Tanto las borracheras como los atracones de alcohol se encuentran más extendidos en el grupo masculino, concentrándose entre los 15 y los 34 años de edad. Por detrás del alcohol, el tabaco es la sustancia psicoactiva más consumida en España entre la población de 15 a 64 años, con una prevalencia de consumo diaria del 32,3%, y del 39,4% en los últimos 12 meses. El 10,5% de la población de 15 a 64 años ha probado los cigarrillos electrónicos, de ellos/as, el 48,9% ha utilizado cigarrillos electrónicos con nicotina y el 24,3% ha fumado cartuchos tanto con nicotina como sin ella. Se aprecia un aumento en el uso de estos dispositivos en el último mes entre los/as jóvenes de 15-24 años. Los hipnosedantes con o sin receta son las sustancias psicoactivas que empiezan a consumirse con mayor edad: el mayor inicio de consumo se da entre mujeres de 35 a 54 años. Según los últimos datos, se estima que 645.000 personas comenzaron su consumo en 2020. El 22,5% de la población de 15 a 64 años los ha consumido con o sin receta alguna vez, superando la barrera del 20% por tercera vez en toda la serie histórica. El 12,0% los ha consumido en el último año, el 8,6% en el último mes y el 6,4% diariamente. Concretamente, un 3,1% de la población de 15 a 64 años admite haber consumido hipnosedantes sin receta alguna vez en su vida, siendo la edad media del primer consumo a los 30,6 años. El porcentaje de consumo es de 1,3% entre aquellos/as que los han consumido en los últimos 12 meses. La prevalencia de consumo de hipnosedantes sin receta es muy similar en todos los grupos de edad y en ambos sexos. El 15,2% de la población de España de 15 a 64 años revela que ha consumido analgésicos opioides con o sin receta alguna vez en su vida, siendo la codeína y el tramadol los analgésicos que presentan una mayor prevalencia de consumo. Estas sustancias son consumidas en mayor proporción por las mujeres, observándose un incremento directamente proporcional en la prevalencia a medida que lo hace la edad, en todos los grupos. Se confirma la tendencia ascendente de personas que empiezan a consumir cannabis, que se posiciona como la sustancia ilegal más accesible (el 59,4% considera que es fácil conseguir esta sustancia). Se estima que 237.000 personas de 15 a 64 años comenzaron a consumir cannabis en 2020. El mayor inicio de consumo se da entre los hombres menores de 25 años (86.000 menores de 15 a 17 años comenzaron a consumirlo). El 37,5% de la población de 15 a 64 años lo ha consumido alguna vez, el 10,5% en el último año, el 8,0% en el último mes (en estos dos últimos tramos temporales se registra una estabilidad en la prevalencia desde el año 2001) y el 2,9% diariamente (este porcentaje ha aumentado respecto a las últimas mediciones). De acuerdo con la escala CAST, el consumo de cannabis se asocia con diversos efectos adversos para la salud entre los que destacan el aumento del riesgo de consumo de otras drogas y adicciones, así como problemas de salud mental. El informe destaca la importancia de las reacciones agudas de la esfera cognitivo-emocional, incluyendo la ansiedad y los problemas de atención, relacionados con un incremento del riesgo de accidentes, por lo que su relación con accidentes de tráfico es un aspecto de especial relevancia. El consumo de cannabis se asocia con un aumento del riesgo de padecer trastornos del comportamiento y psicosis, un riesgo que aumenta cuanto mayor es la frecuencia del consumo y mayor la potencia del cannabis utilizado, y que se eleva aún más cuanto se inicia a edades más tempranas. A este respecto, se observa que el riesgo es cuatro veces mayor si se inicia a los 15 años (actual edad media de inicio en el consumo en España) que si se hace a los 26 años. De acuerdo con el informe, se estima que hasta el 8% de la incidencia de esquizofrenia en la población podría estar relacionada con el consumo de cannabis en jóvenes, de hecho, hay evidencia sobre los cambios estructurales y cognitivos en el cerebro de los adolescentes que puede producir el consumo de cannabis de manera únicamente puntual. La prevalencia de consumo de la cocaína (polvo y/o base) muestra también una tendencia ascendente. Se estima que 61.000 personas (15 a 64 años) la consumieron por primera vez en 2020, siendo el mayor inicio de consumo entre los hombres menores de 25 años (3.000 menores de 15 a 17 años han comenzado a consumirla). El 10,9% de la población de 15 a 64 años ha consumido cocaína en polvo alguna vez, el 2,5% en los últimos 12 meses y el 1,1% el último mes. La percepción de riesgo ante el consumo de drogas alcanza proporciones más elevadas entre las mujeres que entre los hombres, detectándose las mayores diferencias en relación con el consumo de alcohol y el cannabis. Para el 89,2% de las personas, las medidas de mayor eficacia para resolver el problema de las drogas son las educativas, seguidas del control policial y aduanero (82,6%), las campañas publicitarias (81,5%) y del tratamiento (80,1%), siendo las acciones menos populares la legalización de todas las drogas y la legalización del cannabis.
Encuesta sobre uso de drogas en Enseñanzas Secundarias en España. ESTUDES, 2021 La edad media de inicio en el consumo de drogas se sitúa entre los 14 y los 15,6 años y las prevalencias de consumo aumentan con la edad. Las drogas más consumidas por los jóvenes (14-18) son las legales (alcohol y tabaco), seguidas del cannabis y de los hipnosedantes sin receta médica. El consumo de drogas legales está más extendido entre las mujeres y el consumo de todas las drogas ilegales, entre los hombres (excepto para los hipnosedantes sin receta médica). El alcohol es la sustancia psicoactiva percibida como menos peligrosa entre los/as estudiantes y la que se obtiene con mayor facilidad, principalmente en supermercados (56,3%) y bares/pubs (48,2%). Aunque el consumo de alcohol sigue estando en niveles elevados, se observa un descenso en las prevalencias de consumo en todos los tramos temporales. Se detecta una reducción notable en la adquisición y consumo de bebidas alcohólicas en lugares de ocio como discotecas, bares
, mientras que se ha intensificado el consumo doméstico, especialmente en las casas de otras personas. El consumo intensivo, borracheras y binge drinking, continúan presentando prevalencias elevadas (con un ligero descenso en esta edición): el 39,4% de los/as estudiantes se ha emborrachado en el último año (el 43,6% de las chicas y el 35,4% de los chicos). Se observan similitudes entre el patrón de consumo de alcohol en borracheras y en atracón (binge drinking) (realizado por un 27,9% de los/as estudiantes en el último mes). En este patrón de consumo aumenta la presencia de las mujeres a las edades más tempranas (14 y 17 años), esto cambia a los 18 años, cuando el porcentaje es mayor entre los hombres. Se detecta también una relación directamente proporcional entre el binge drinking y la edad. Se registra una tendencia descendente en el consumo de tabaco, continuando con la fase de descenso de consumo iniciada en 2006, coincidiendo con la Ley 28/2005 y que continuó hasta 2021, con diversos altibajos. Los últimos datos muestran que el 38,2% ha fumado tabaco alguna vez en la vida, el 30,7% en el último año y el 23,9% durante el último mes. Se estima que en 2021 han empezado a consumir tabaco 169.500 estudiantes de 14 a 18 años (36.000 menos que en 2019). La percepción de riesgo ante el consumo diario de tabaco se ha elevado levemente y el 93,9% de los y las jóvenes considera que puede producir muchos o bastantes problemas de salud. Disminuye también el número de estudiantes que convive en hogares con fumadores hasta el 39,1%. El 44,3% de ellos/as ha utilizado alguna vez cigarrillos electrónicos, con mayor frecuencia entre los chicos y cargados con cartuchos sin nicotina (38,6%). El cannabis es la droga ilegal más consumida por los y las jóvenes, unida a una baja percepción del riesgo asociado a su consumo, siendo tras el alcohol y el tabaco (ambas sustancias legales), la sustancia psicoactiva percibida como más disponible para esta población. El 28,6% de los/as estudiantes afirma haber consumido cannabis alguna vez en la vida, el 22,2% en los últimos 12 meses y el 14,9% en el último mes. Datos de 2021 indican que 155.800 estudiantes con edades comprendidas entre los 14 y 18 años habrían empezado a consumirlo. Si bien se registra un ligero descenso en las prevalencias, se ha detectado un pequeño repunte en el consumo problemático de cannabis entre los/as consumidores/as. Los hipnosedantes son la sustancia que mayor proporción de estudiantes consumen después del alcohol, el tabaco y el cannabis. El consumo es más prevalente entre las mujeres y se detecta una tendencia ligeramente ascendente en el consumo de hipnosedantes sin receta entre los/as jóvenes de 14 a 18 años: un 10,3% de los/as jóvenes los ha consumido alguna vez en la vida, el 7,2% en el último año y el 3,6% en el último mes. Las nuevas sustancias psicoactivas son, en términos generales, sustancias con prevalencias de consumo más bajas que las drogas clásicas. Con respecto al nivel de información, el 22,5% de los y las jóvenes de 14 a 18 años afirman estar perfectamente informados/as sobre el tema de las drogas. El centro educativo (74,2%) y la familia (66,9%) son las principales vías por las que reciben esta información. El 70,3% ha recibido información sobre los efectos y problemas asociados a drogas legales (tabaco, alcohol, hipnosedantes) y el 62,1% sobre los efectos y problemas asociados a drogas ilegales (hachís/marihuana, cocaína, drogas de síntesis
). Tanto el consumo de drogas legales (alcohol, tabaco e hipnosedantes) como el consumo de drogas ilegales (cannabis, cocaína en polvo, cocaína base, heroína, anfetaminas, éxtasis, alucinógenos o gHB) adquiere mayor prevalencia conforme se retrasa el regreso a casa de las salidas nocturnas. Se observa que el porcentaje de alumnos que han sufrido bullying (acoso) a través de Internet o por otros medios es del 10,7%, resultando mayor entre aquellos que han consumido hipnosedantes en el último mes (22,7%).
Tratamiento por consumo de drogas España, 2020 La cocaína se mantiene como la droga ilegal que causó un mayor número de admisiones a tratamiento (45,4% del total), seguida del cannabis (27,5%) y los opioides (22,1%). Más de la mitad (56,6%) de los pacientes iniciaron tratamiento por iniciativa propia o fueron animados por sus parientes o amigos, aunque el sistema público de salud (hospitales u otros servicios de salud/médico general/Atención Primaria de salud y otros servicios de drogodependencias) derivó a tratamiento aproximadamente a una cuarta parte de los admitidos (23,5%). El informe destaca el peso del cannabis entre los/as menores de edad que acuden a tratamiento por abuso o dependencia de sustancias psicoactivas en nuestro país: según los datos, el 95,1% de todos y todas los/as menores de 18 años que se han tratado por consumo de drogas ilegales en España, lo han hecho por problemas asociados al consumo de cannabis.
Urgencias hospitalarias en consumidores de drogas en España 2020 Con respecto a las atenciones en urgencias relacionadas con el consumo de drogas, se observa que la situación de pandemia por la COVID-19 ha impactado en las mismas, de modo que, aunque las sustancias que más episodios de urgencias generan continúan siendo el cannabis, la cocaína y los hipnosedantes, el peso de estas sustancias en urgencias presenta un gran cambio respecto a lo que se venía observando. El mayor porcentaje de ingresos en las urgencias es por anfetaminas, heroína, otros opioides, hipnosedantes y cannabis. Los datos revelan que los traslados a otros centros en las urgencias son más frecuentes en las urgencias relacionadas con hipnosedantes (5,2%), y se dan más altas voluntarias entre quienes consumen opioides (10,5%). Se registra una tendencia ascendente en la edad media de las personas atendidas en urgencias, pasando de 27,8 años (1996) a 36,5 años (2020). Quienes acuden por consumo de opioides e hipnosedantes tienen una edad más avanzada, mientras que aquellos/as que acuden por consumo de éxtasis, alucinógenos, anfetaminas y cannabis son más jóvenes. Concretamente, el perfil de quienes tienen una urgencia relacionada con el consumo de hipnosedantes (como sustancia única) es el de una mujer (62,5%), con una edad media de 37,6 años, cuyo episodio acaba mayoritariamente con alta médica (76,1%). El 66,1% de los casos son valorados por el médico como intentos autolíticos y el 26,2% se producen en consumidores habituales de estas sustancias. Asimismo, el informe subraya que, en el 55,7% de los episodios se recoge una patología psiquiátrica previa en la hoja de urgencias, principalmente trastornos emocionales (ansiedad y depresión). Por sexo, el porcentaje de intentos autolíticos es mucho mayor entre las mujeres que entre los hombres (75,2% vs 39%). Se detectan también más episodios de urgencia en mujeres con patología psiquiátrica que en hombres. Los síntomas más habituales con los que los pacientes llegan a urgencias son, en todas las sustancias, la ansiedad (referida en el 57% de los episodios), la agitación, la agresividad o irritabilidad, los vómitos, las alucinaciones, los delirios o episodios psicóticos, el coma y la pérdida de conciencia.
Mortalidad relacionada con drogas en España 2020 Como se viene observando en los últimos años, el 72,0% de las personas fallecidas por drogas tenía más de 40 años (porcentaje más elevado de la serie histórica y que confirma el aumento de la edad media de los fallecidos y las fallecidas), siendo mayoritariamente hombres (77,4%). El 26,1% mostraron evidencias de suicidio, siendo este porcentaje mucho mayor entre las mujeres (49,7%) que entre los hombres (18,6%).
Fuente: Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones. Informe 2022. Alcohol, tabaco y drogas ilegales en España. Madrid: Ministerio de Sanidad. Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas; 2022. 293 p |