¿Qué papel juega la ansiedad y depresión en el dolor crónico? Las personas con dolor crónico tienen cinco veces más probabilidades de experimentar síntomas de ansiedad o depresión. Esta es la conclusión de un estudio a gran escala publicado en la revista Pain.
Según los autores, la literatura científica muestra que el dolor crónico a menudo se acompaña de síntomas clínicamente significativos de ansiedad y/o depresión. Sin embargo, se sabe poco sobre la prevalencia a nivel población de estos problemas. Tampoco se conoce en profundidad si este grupo se diferencia de los que presentan dolor crónico de manera aislada o de los pacientes con problemas de salud mental comunes.
De esta manera, el estudio recopiló información de 31.997 participantes adultos. Los resultados del estudio muestran que:
- Cerca de 1 de cada 20 adultos sufre dolor crónico junto con sintomatología ansiógena o depresiva. Esta situación limita su vida cotidiana e interfiere con su rendimiento laboral y otras tareas domésticas.
- Las personas con dolor tienen cinco veces más probabilidades de experimentar síntomas de ansiedad o depresión en comparación con quienes no lo padecen.
- Un 55,6% de los participantes con ansiedad o depresión también sufre dolor crónico, frente al 17,1% de los participantes sin síntomas de ansiedad o depresión.
- El impacto negativo en el funcionamiento diario fue mayor en aquellas personas con dolor y síntomas de ansiedad y/o depresión, que para los otros grupos que presentan estos problemas por separado. En concreto, casi el 70% informa de limitaciones en el trabajo. Asimismo, más del 55% experimenta dificultades sociales y casi el 44% tiene problemas para realizar tareas cotidianas.
Para los autores del estudio, es de vital importancia abordar el sufrimiento psicológico en los pacientes con dolor y considerar la estrecha relación entre la salud mental y el dolor crónico. El bienestar psicológico del paciente con dolor crónico rara vez se tiene en cuenta en los programas de intervención, a pesar de su impacto en el funcionamiento diario y en la calidad de vida. En este sentido, resulta de interés diseñar programas de intervención específicos para los pacientes con dolor crónico que presentan sintomatología clínica de ansiedad y/o depresión, debido a la dificultad que plantean el malestar psicológico en la evolución del dolor.
Fuente:
Jennifer S. De La Rosa et al, Co-occurrence of chronic pain and anxiety/depression symptoms in U.S. adults: prevalence, functional impacts, and opportunities, Pain (2023). DOI: 10.1097/j.pain.0000000000003056