El ejercicio físico supone un factor de protección frente a las enfermedades crónicas y la muerte prematura, al mismo tiempo que contribuye a la mejora de la calidad de vida, retrasando el envejecimiento y mejorando el estado de bienestar. Estas son algunos de los beneficios asociados a la práctica de ejercicio regular, que el Servicio Andaluz de Salud, dentro del marco de la Estrategia de Cuidados de Andalucía, recoge en su Guía para disminuir el sedentarismo.

La guía, dirigida a los profesionales sanitarios, ofrece recomendaciones para poder diseñar e implementar intervenciones que contribuyan a reducir el sedentarismo entre los pacientes, mediante una revisión de la literatura científica.

De esta manera, la guía aborda los beneficios de la actividad física, las principales recomendaciones sobre la actividad física establecidas en las guías de práctica clínica (diferenciando entre ejercicios de tipo aeróbico, ejercicios para mejorar fuerza y resistencia muscular y ejercicios para mejorar la amplitud de movimiento o flexibilidad), las estrategias que el clínico puede poner en marcha para plantear al paciente en consulta la necesidad de realizar ejercicio físico, las situaciones en las que no se recomienda la práctica de la actividad física, así como la manera en que se debe estructurar una sesión de ejercicio físico y la progresión del mismo, entre otros aspectos.

Las personas interesadas pueden acceder al recurso a través del siguiente enlace:

Guía para disminuir el sedentarismo