El periodo navideño y las comidas copiosas asociadas a esta época del año acaba de terminar. En este momento, son muchas las personas que, tras mirarse en el espejo, se plantean perder peso, pero ¿cómo conseguirlo?.

Para la psicóloga Ana Martín Vázquez, tal y como aparece publicado en www.saludalia.com, es importante distinguir entre régimen y dieta. Régimen hace alusión a la regulación de la dieta, la ingesta de medicamentos así como otras conductas relacionadas con la salud, con el fin último de conservar o restablecer ésta. En el caso de la dieta o régimen alimentario, hablamos de un correcto empleo de alimentos para estar sano, ya sea para su mantenimiento o para su recuperación.

Las mujeres suelen ser las que eligen ponerse a dieta con más frecuencia, principalmente debido a la ansiedad que les provoca aumentar de peso. En cuanto a los motivos fundamentales que llevan a intentarlo se encuentran la estética así como razones de salud.

Sin embargo, no todas las dietas resultan igualmente eficaces. Algunos motivos por los que pueden llegar a fracasar son «plantearse metas inalcanzables o poco realistas», «pensar que no se va a lograr, incluso antes de intentarlo» o «el mantenimiento de comportamientos diferentes a los que estábamos acostumbrados y cuya recompensa es lejana».

Una vez que la persona ha decidido bajar de peso y ya ha acudido a la consulta del facultativo, el psicólogo puede hacer que la persona se dé cuenta y aprenda a «reconocer las frases negativas que uno se dice a sí mismo y que contribuyen a caer en las tentaciones», «plantear pequeñas metas que, al conseguirlas, le animen a continuar» o «mantener una actitud positiva», entre otros.

En cuanto a las sugerencias que da la psicóloga para «mantener una dieta» éstas son algunas:

• «Si, por ejemplo, suele «picotear» tumbado en el sillón mientras ve la televisión, intente, en función de sus gustos, cambiar la actividad de comer por otra que le mantenga las manos ocupadas».

• «No tenga por principal objetivo disminuir su peso, sino aprender una nueva forma de alimentarse».

• «No se tome la dieta como un sacrificio continuado sino como una nueva forma, más sana, de comportarse ante la comida».

Para Hernán Cancio, psicólogo clínico y director técnico del Instituto de Psicología Aplicada Antae, tal como aparece en diariomedico.com, en los programas de pérdida de peso «tener claro cuál es el significado emocional que implica perder peso, lo que supone una motivación, y mostrar los beneficios, no los peligros, que reporta es una de las piezas clave para conseguir la meta». En cuanto al papel del psicólogo dice «la persona es quien debe decidir cuándo perder peso y el profesional debe brindar su ayuda porque someterse a un programa de pérdida de peso no es tarea fácil y mucho menos mantener la pérdida a largo plazo».

Para él, los motivos estéticos son los más frecuentes a la hora de perder peso pero cada vez son más las razones de salud las que llevan a tomar esta decisión. En este proceso, el refuerzo psicológico es fundamental ya que la acumulación de fallos en su seguimiento está relacionado con unas mayores posibilidades de fracaso.

El psicólogo concluye diciendo «hay que tener en cuenta que nos enfrentamos a un problema con condicionamientos sociales tradicionales. Hay que fomentar la idea de comer bien, que no es la de comer mucho».