Con la llegada de las fiestas navideñas, muchas familias comienzan los preparativos para las celebraciones, entre los que se incluye la compra de regalos, así como juegos y juguetes, especialmente, para los más pequeños de la casa.
El juego es esencial para el desarrollo óptimo de los niños y las niñas, dado que contribuye a su bienestar cognitivo, físico, social y emocional, suponiendo a su vez, una oportunidad ideal para interaccionar con las familias. A este respecto, numerosos expertos recuerdan que el juguete más educativo para un niño o una niña, es el que fomenta las interacciones entre él o ella y su familia/cuidadores, en un contexto de juego de apoyo, no dirigido por el adulto.
Asimismo, ponen de relieve la importancia de que los juegos y juguetes que se compren, estén adaptados a la edad evolutiva del niño o niña que los recibe.
En los últimos tiempos, en línea con el avance tecnológico, han proliferado distintos tipos de juguetes electrónicos, sensoriales, ruidos y luces y plataformas basadas en medios digitales con software y aplicaciones móviles orientados a niños/as. De acuerdo con los expertos, estos nuevos tipos de juego pueden ser percibidos por los padres como necesarios para el progreso del desarrollo, pese a la falta de evidencia de apoyo y, quizás lo más importante, con el potencial de interrumpir las interacciones entre el/a niño/a y las personas adultas.
Fuente: freepik. Foto: freepik. Fecha: 10/12/24
A este respecto, y con el fin de facilitar las interacciones entre los padres/cuidadores y el niño o la niña, el juego entre iguales y el desarrollo de la imaginación, recomiendan los juguetes tradicionales (físicos):
(1) Juegos simbólicos y/o de simulación (p. ej., muñecas, figuras de acción, autos, utensilios de cocina y/o alimentación, etc.). Ayudan a aprender a usar palabras e historias para imitar, describir y hacer frente a los sentimientos y las situaciones de la vida real. El juego imaginario es una gran parte del desarrollo social y emocional de un niño.
(2) Motricidad fina, adaptativa y/o manipulativa: los niños y niñas pueden aprender habilidades de resolución de problemas con juguetes ‘tradicionales’, como bloques, formas, rompecabezas y trenes. Este tipo de juguetes apoyan las habilidades motoras finas y pueden mejorar el desarrollo cerebral y, específicamente, del lenguaje. Algunos son útiles para desarrollar habilidades matemáticas tempranas.
(3) Arte: algo tan sencillo como cajas de cartón o blocs de papel aún hacen felices a los más pequeños. Los libros para colorear, rotuladores, lápices de colores, arcilla y calcomanías son excelentes regalos que desarrollan la creatividad y ayudan a mejorar las habilidades motoras finas.
(4) Lenguaje y/o conceptos: muchos juegos y juguetes tradicionales ahora están disponibles en versiones electrónicas, diseñados, en algunos casos, para sustituir la interacción humana. Por ejemplo, un osito de juguete que lee una historia en voz alta o un juego de mesa que cuenta con una aplicación con jugadores virtuales. Sin embargo, cabe recordar que las interacciones humanas reales son esenciales para el crecimiento y el desarrollo de un/a niño/a. En este sentido, los juguetes digitales nunca deberían reemplazar al juego real, cara a cara. Los juegos de cartas y juegos de mesa tradicionales (no las versiones de videojuegos o aplicaciones) e incluso las cartas y los libros de juguete crean oportunidades para que el niño o la niña pueda interactuar con otras personas y divertirse de forma conjunta;
(5) Motricidad gruesa y/o física: los juguetes que incluyen actividad física (como balones, juguetes para empujar y tirar, juguetes para montar y triciclos), ayudan al desarrollo físico y pueden mejorar la autorregulación y la interacción con sus compañeros/as, debido a la necesidad de negociar en torno a las reglas que, generalmente, tienen lugar cuando los niños juegan juntos.
Teniendo en cuenta lo anterior, presentamos una serie de recomendaciones que pueden ser de utilidad a las familias u otras personas a la hora de elegir juguetes y/o juegos para sus hijos/as:
- Recuerda que un buen juguete no tiene que estar a la moda o ser costoso. A veces, los juguetes más sencillos suelen ser los mejores, al brindar la oportunidad de utilizar la imaginación para jugar con ellos.
- Regálales juguetes seguros y asequibles, que sean adecuados para su desarrollo. Fíjate en la edad recomendada del juguete, porque a cada etapa del desarrollo le acompañan unas características propias, y no todos los juguetes son aptos para según qué edad:
- De 0 a 12 meses: muchos de los juguetes que necesitan durante el primer año de vida deben estar diseñados para promover la interacción en una variedad de formas, a través de la manipulación y la interacción sensorial (ruidos, texturas…). Los bebés tienden a llevarse los juguetes a la boca.
- Juguetes adecuados: sonajeros, espejos irrompibles, gimnasios para bebés, móviles con colores brillantes y con múltiples patrones, peluches o muñecos suaves, blandos y coloridos, etc.
- De 1 a 2 años: a esta edad comienzan a experimentar con los patrones de causa-efecto, disfrutando de cualquier juguete que responda a sus acciones y les permita hacer uso de sus habilidades motoras recién adquiridas.
- Juguetes adecuados: cubos, anillas grandes, piezas para clasificar, juegos de encajar piezas a través de orificios, rompecabezas de 4 piezas, instrumentos musicales simples y resistentes (tambor o pandereta), vehículos de juguete, etc.
- De 2 a 3 años: el niño/a está desarrollando las habilidades motoras finas para completar un rompecabezas o construir bloques de forma más precisa. Comienza a disfrutar de juegos de simulación que imitan acciones de la vida diaria que realizan las personas que les rodean.
- Juguetes adecuados: juguetes para montar (triciclos, bicicleta sin pedales), accesorios para juegos imaginarios (cocinas de juguetes, juego de platos, teléfonos, caja registradora), instrumentos musicales (pianos de juguete), rompecabezas, juegos de construcción de encajar, etc.
- De 4 a 5 años: se incrementa la capacidad de aprendizaje, siendo un buen momento para introducir juguetes educativos interactivos que enseñen matemáticas y habilidades verbales. Escoge juguetes que ofrezcan un feedback positivo ante una respuesta correcta (por ej., “muy bien, vamos a jugar otra vez”), en lugar de aquellos que emiten timbres o pitidos cada vez que el niño o la niña se equivoca al responder. A estas edades juegan a imaginar que son otras personas o personajes: princesas, hadas, piratas, pilotos, bailarines/as, atletas, etc. Comienzan a realizar pequeñas construcciones y se estimula su creatividad.
- Juguetes adecuados: kits de manualidades, juegos de plastilina, bloques de formas distintas, juguetes electrónicos que enseñan matemáticas, fonética o lectura, rompecabezas más complejos, juegos de construcción de casas, juegos de transporte (pistas de carreras, estaciones de tren, aeropuertos, etc.), muñecos/as, figuras de acción, disfraces, bicicletas (con ruedines), etc.
- De 6 a 7 años: comienzan a interesarse por los experimentos científicos (con supervisión), por pintar con acuarelas, realizar decoraciones o hacer joyas con cuentas. Los amigos cobran cada vez más importancia (juegan más a juegos de mesa o de actividad física), y pueden comenzar a pedir un juego o juguete sólo porque los otros también lo tienen. Muestran ya preferencia por videojuegos o juegos de pantallas.
- Juguetes adecuados: kits de manualidades y artesanía, muñecos, juego de ciencias y exploración, telescopio, microscopio, lupa, juegos de construcción tipo Legos, coches de control remoto, juegos de mesa y de estrategia (ajedrez, dominó, damas, parchís ), etc.
- Más de 8 años: muchos niños y niñas disfrutan de los deportes al aire libre (fútbol, baloncesto, bicicleta, patinaje, patinetes, etc.), así como de los juegos competitivos. Sus intereses son similares a los de las personas adultas.
- Juguetes recomendados: Tablet u ordenador (teniendo en cuenta el límite de uso de tiempo), juego de ciencia e investigación, kit de manualidades y artesanía, juegos para practicar deporte al aire libre, juegos de construcción complicados, juegos de mesa y juegos de estrategia (Monopoly, scrabble, Trivial Pursuit), etc.
- Niños con necesidades especiales: la elección de los juguetes puede resultar complicada, dado que las recomendaciones en el juguete mismo se establecen por edad, no por capacidades de desarrollo. A este respecto, los padres pueden optar por comprar juguetes funcionales (sencillos, de activación rápida, con luces y sonidos), en lugar de juguetes simbólicos que fomenten el juego de simulación, la creatividad y las interacciones (por ej., la granja de animales de juguete).
- Puede ser de gran utilidad contar con la orientación de profesionales expertos (entre ellos, psicólogos/as educativos/as), a la hora de elegir qué juguetes y actividades son más adecuados/as para la edad de desarrollo de sus hijos e hijas, o cómo adaptarlos a sus necesidades especiales, en aras de garantizar el crecimiento continuo y la estimulación de sus habilidades.
- Puede ser importante adaptar los juguetes al tipo de discapacidad. Los expertos recomiendan combinar la fácil accesibilidad con retroalimentación multisensorial. Por ejemplo, adaptaciones en el diseño que incluyen tiras de velcro para ayudar al o la menor a sostener un juguete o el uso de un botón pulsador más grande para activarlo con facilidad, y la aparición de luces y sonidos al encenderlo.
- Los niños con necesidades especiales también se benefician al máximo del juego con juguetes en el contexto de la interacción con sus padres y/o cuidadores.
- Ten cuidado cuando veas la palabra «educativo» en la etiqueta. La mayoría de las tablets, juegos de ordenador y aplicaciones que se anuncian como «educativas», suelen enfocarse en habilidades de memoria, como el abecedario y las formas, y que constituyen sólo una parte de la preparación escolar. Las habilidades que los niños y las niñas realmente necesitan aprender para tener éxito en la escuela (y en la vida) incluyen el control de los impulsos, el manejo de las emociones y el pensamiento creativo y flexible. Estas habilidades se aprenden mejor a través del juego social y no estructurado con la familia y los amigos. De hecho, hay investigaciones que sugieren que los juguetes basados en tabletas pueden retrasar el desarrollo social de los bebés y los/as niños/as pequeños/as, porque no incluyen expresiones faciales, gestos y vocalizaciones de la vida real.
- Por lo tanto, elige juguetes que promuevan el aprendizaje y el crecimiento en todas las áreas del desarrollo, que fomenten las interacciones con sus cuidadores/as, impulsen la exploración y la resolución de problemas, que no sean demasiado estimulantes y animen a los niños a usar su imaginación, y a ser mental y físicamente activos/as.
- No olvides el potencial de los juguetes para promover estereotipos basados en la raza o el género.
- Déjalos jugar con los juguetes que elijan.
- Limita el uso de videojuegos y juegos de pantallas. El tiempo total frente a las pantallas -incluido el uso de la televisión y el ordenador-, debe ser inferior a 1 hora al día para niños de 2 años o más y ha de evitarse en niños de 18 a 24 meses de edad. Los niños menores de 5 años pueden jugar con el ordenador, la Tablet o los videojuegos solo si son apropiados para su desarrollo y deben estar acompañados por los padres o el/la cuidador/a.
- A la hora de comprar un regalo, los expertos aconsejan a las familias seguir la “Regla de los 4 regalos”:
- Algo que deseen (escrito en su carta de Reyes o de Papá Noel)
- Algo para ponerse (puede ser ropa o complementos como gorras o gafas de sol)
- Algo para leer (libros, cómics, cuentos…)
- Algo que necesiten (algo práctico)