¿Se observan diferencias de género en los problemas de conducta infantiles? Esta fue la pregunta de investigación de un estudio publicado en Psicothema. Las autoras del estudio son María Álvarez-Voces y Estrella Romero de la Universidad de Santiago de Compostela.

Los problemas de conducta abarcan comportamientos como agresión, destrucción, desafío, berrinches y violación de normas. Según se indica en el texto, los estudios más recientes muestran que estos problemas afectan entre el 5 y el 14% de los menores. Asimismo, las dificultades de conducta tienen un gran impacto en el rendimiento académico y, en muchas ocasiones, requieren ayuda clínica.

Tal y como exponen las autoras, las investigaciones previas han evidenciado una mayor prevalencia de estos problemas de conducta en niños. Esta visión ha impedido que se evalúe en profundidad las diferencias de género que se observan en las manifestaciones y determinantes de este tipo de conductas, sobre todo en la infancia temprana. A este respecto, se ha propuesto la “paradoja de género», que sugiere que los problemas de conducta en niñas se asocian con más comorbilidades y deterioro global.

Las autoras también señalan en su exposición del tema los factores familiares (bajo estatus socioeconómico, estrés parental, prácticas parentales) y extrafamiliares (violencia comunitaria, compañía de pares desviados) que también están vinculados a los problemas de conducta. No obstante, el interés de la investigación se ha centrado en el temperamento y los rasgos de personalidad.

Así, las autoras mencionan las dos áreas principales de investigación, centradas en las variables del modelo de temperamento de Rothbart y en los rasgos psicopáticos, como la falta de empatía, el engaño y la necesidad de estimulación. A este respecto, se ha observado una falta de comprensión sobre si los factores individuales asociados a los problemas de conducta difieren entre niños y niñas. Además, las autoras destacan la falta de estudios centrados en la persona que permitan la identificación de perfiles heterogéneos en menores con problemas de conducta.

Por este motivo, el objetivo de la investigación se centra en la exploración de las diferencias de género respecto a las características, determinantes e implicaciones de los problemas de conducta en la infancia.

La investigación realizada aborda la diversidad de configuraciones de rasgos individuales en niños con problemas de conducta. Específicamente, se ha centrado en analizar si se pueden identificar perfiles similares en niños y niñas y si los predictores y resultados de dichos perfiles son invariantes entre géneros. Para ello, las autoras llevaron a cabo un estudio longitudinal de tres años con 401 participantes (la mitad de cada género), con problemas graves de conducta.

El análisis multigrupo de perfiles latentes basados en rasgos temperamentales y psicopáticos mostró los siguientes resultados:

• Aunque los perfiles son similares entre géneros en términos de medias y variabilidad de las variables, la distribución de niños y niñas en cada perfil es desigual.
• Se identifican cuatro perfiles distintos en ambos géneros: Callous-Undercontrolled, Introverted, High Psychopathic y Extraverted.
• Las niñas pertenecían con mayor frecuencia al grupo menos problemático.
• A pesar de la similitud en los predictores entre géneros, se observa una diferencia en los resultados. Por ejemplo, las niñas tienden a pertenecer más al perfil Introverted. Dicho perfil se caracteriza por un mayor control de esfuerzo y baja sociabilidad. En los niños, en cambio, este perfil se asocia con mayores síntomas emocionales. Por otro lado, el perfil High Psychopathic, tradicionalmente más común en niños, se relaciona en las niñas con niveles más bajos de comportamiento prosocial, sugiriendo una disfunción social específica en las niñas con esta configuración de rasgos psicopáticos.

En definitiva, el estudio muestra la diversidad de características individuales en niños y niñas con problemas de conducta, específicamente examinando rasgos temperamentales y variables psicopáticas.

A pesar de ciertas limitaciones, la investigación resalta la importancia de considerar tanto los rasgos temperamentales como psicopáticos en la infancia. Además, destaca la relevancia de tener en cuenta las diferencias de género en la identificación y prevención de estos problemas de conducta. Esto es especialmente relevante en el caso de las niñas, donde las manifestaciones pueden ser distintas y requieren enfoques específicos de intervención psicológica.

Referencia:

Álvarez-Voces, M., & Romero, E. (2024). Gender differences in children’s conduct problems: A multigroup analysis of latent profiles based on temperament and psychopathic traits. Psicothema, 36(1), 26-35. https://doi.org/10.7334/psicothema2023.44