Desde el año 1979, el cuerpo de la Guardia Civil cuenta con un Servicio de Psicología propio, integrado por psicólogos y psicólogas componentes del cuerpo, cuya función es dar respuesta a las necesidades y demandas de índole psicológica del personal de la Guardia Civil, velando a su vez por su salud mental y bienestar psicofísico. Este Servicio cuenta también con un Plan Preventivo de Asistencia Psicológica, una herramienta orientada a la prevención de la salud mental en tres niveles (primaria, secundaria y terciaria).
Para hablarnos en detalle sobre la importancia de estos servicios y el papel fundamental que se otorga a la Psicología dentro de la Guardia Civil, Infocop ha querido entrevistar a José Luis González Álvarez, coronel psicólogo en el Servicio de Psicología del Cuerpo.
José Luis González es Doctor en Psicología (ámbito jurídico y forense) y Diplomado Superior en Psicología Militar. Máster en Psicología Clínica y Máster en Ciencias Forenses, cuenta con experiencia profesional dentro de la Guardia Civil desde el año 1985 y ha sido fundador de la Sección de Análisis del Comportamiento Delictivo (SACD; 1995) y de los Equipos Mujer Menor (EMUMEs; 1996) de la Policía Judicial del Cuerpo.
Foto: José Luis González Álvarez
Desde 2015, ostenta el cargo de Jefe de Área de Estudios en la Dirección General de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior. Asimismo, desde el año 2022 presta sus servicios en el Mando de Personal de la Guardia Civil (Jefaturas de Enseñanza, y de Asistencia al Personal).
Autor de artículos científicos, libros y capítulos de libro, es integrante de distintos grupos de investigación científica, sobre aplicaciones de la psicología en la investigación criminal operativa (psicología criminalista): entrevista e interrogatorio, perfilamiento criminal, detección del engaño, autopsia psicológica, análisis de la delincuencia grave y violenta… También es formador de especialistas de Policía Judicial de la Guardia Civil, y colaborador docente e investigador científico con diversas Universidades y Fundaciones españolas desde hace más de 20 años, como las formaciones de postgrado (Máster) del Instituto de Ciencias Forenses y de la Seguridad de la Universidad Autónoma de Madrid, o el Máster en Psicología Jurídica y Forense de la Universidad de Granada (entre otros).
ENTREVISTA
Actualmente, usted ostenta el cargo de Coronel psicólogo en el Servicio de Psicología de la Guardia Civil, del Ministerio del Interior, ¿podría decirnos qué supuso para usted su nombramiento en este puesto?
Personalmente, es una estimulante culminación de una carrera profesional de casi 40 años de servicio al ciudadano, que ya va llegando a su fin. Profesionalmente, ingresé en la Guardia Civil en 1984, y desde que obtuve la licenciatura en Psicología en 1995 y el doctorado en 2005, siempre he venido ejerciendo como psicólogo en el Cuerpo. Aunque empecé trabajando en la especialidad de Psicología Criminalista (Psicología Jurídica), en este nuevo destino tendré la oportunidad de contribuir al desarrollo de las otras tres áreas profesionales de la psicología aplicada a la policía y a la seguridad pública que definió internacionalmente la APA en 2013: organizacional, asistencial y formativa.
De hecho, la Guardia Civil cuenta desde hace casi 44 años con un Servicio de Psicología propio, dotado con profesionales de la Psicología con los que dar respuesta a las necesidades y demandas de la Institución. ¿Cómo se estructura este servicio y cuáles suelen ser los principales cometidos que llevan a cabo? ¿Podría señalarnos qué tipo de intervenciones llevan a cabo los psicólogos y psicólogas que lo conforman?
Efectivamente, más que mi persona lo que interesa es enfatizar que la Guardia Civil ha apostado por la Psicología desde muy temprano. El Servicio de Psicología del Cuerpo ya ha acumulado una gran solera, porque se fundó en 1979.
Desde su creación, tal y como reza en las disposiciones normativas que lo han regulado, ha sido el órgano encargado “del asesoramiento y auxilio al Mando en el conocimiento científico del comportamiento, aptitudes, actitudes e intereses del personal de la Guardia Civil, de las relaciones de éstos con la Institución, desde la perspectiva de la psicología clínica, organizacional, educativa y social; así como de la realización de cuantos informes y estudios sean necesarios sobre orientación, clasificación, selección y adaptación del personal al medio profesional, acción psicosocial individual y colectiva, y factores condicionantes de su motivación”.
Que haya pervivido hasta nuestros días da idea de su relevancia, de que ha sabido afrontar los desafíos del cambio de siglo, y de que cuenta con una sólida reputación, experiencia, y credibilidad.
Se estructura en un órgano central situado en la Dirección General del Cuerpo (Madrid), que coordina más de 60 Gabinetes territoriales desplegados en todas las provincias, centros de enseñanza, y en algunas unidades centrales relevantes (como la Agrupación de Tráfico o la Jefatura de Policía Judicial).
Las y los psicólogos destinados en el servicio son componentes del Cuerpo, que cuentan con esta titulación superior, y que desarrollan las tareas necesarias en cada momento para cumplir con los objetivos enunciados antes. Cometidos que están relacionados con la selección de los mejores aspirantes en los procesos de ingreso en el Cuerpo, y a la de los más idóneos en los procesos de promoción y de especialización.
Velando por la salud mental y el bienestar psicofísico de los agentes, fundamentalmente a nivel preventivo, pero también una vez que se han visto afectados por el estrés y deben estar apartados temporalmente del servicio al ciudadano. Preparando y formando a los guardias civiles para afrontar precisamente ese estrés policial (fomentando su resiliencia); para su mejor adaptación a la cultura de la organización; al perfeccionamiento del liderazgo entre los mandos; y el fomento de hábitos saludables, como los relacionados con el deporte y la actividad física con el objetivo de la mejora de la condición psicofísica de los guardias civiles. Y, en fin, prestando apoyos en actividades operativas, fundamentalmente de investigación criminal (policía judicial).
Este importante Servicio ha sido pionero en implementar un Plan Preventivo de Asistencia Psicológica en el cuerpo (PAPP). ¿En qué consiste dicho Plan y a quienes está dirigido?
La función asistencial del Servicio de Psicología es, quizá, la más conocida por el personal del Cuerpo, porque se ocupa de la prevención en salud mental a todos los niveles (desde la primaria a la terciaria) y, como ya he comentado, de actuar cuando el personal no está en condiciones de prestar adecuado servicio al ciudadano, puesto que la Guardia Civil tiene la obligación de velar porque todos sus miembros trabajen en condiciones óptimas. Esta área funcional tiene entre sus cometidos los de diseñar e implementar planes preventivos, realizar las evaluaciones psicológicas y seguimientos periódicos a los componentes del Cuerpo que se encuentren de baja por motivos psíquicos, o el ofrecimiento de apoyo a los familiares de primer grado en situaciones de crisis o de emergencias (como, por ejemplo, accidentes en acto de servicio o terrorismo).
También se impulsa la intervención, formación e investigación sobre un fenómeno tan preocupante como las conductas autolíticas del propio personal, con el objetivo de controlar los factores de riesgo que las provocan. Siendo aquí donde actúa el PAPP, implementado en marzo de 2002, sostenido por un servicio telefónico de atención psicológica (TAP: 900 200 062), gratuito, confidencial, y atendido las 24 h, para respuesta inmediata ante situaciones críticas que puedan experimentar las y los guardias civiles. Sobre el suicidio policial se habla y escribe mucho, pero a veces sin suficiente rigor, y es frecuente encontrarse con exageraciones acientíficas. Para aportar luz, el Servicio de Psicología de la Guardia Civil atesora autopsias psicológicas rigurosas, que permiten elaborar planes preventivos basados en la evidencia.
Sabemos que el pasado mes de marzo, se publicó una nueva normativa por la que se regula el currículo de la enseñanza de formación para la incorporación a la Escala de Oficiales del Cuerpo, incluyendo la Psicología entre las titulaciones que permiten el acceso directo. ¿Qué supone esto para los/as psicólogos/as que se planteen ingresar en la Guardia Civil?
Pues supone un mecanismo de acceso muy rápido a los puestos de trabajo superiores del Cuerpo, debido a que a partir de este año 2023 se podrán reservar plazas en la oferta de empleo público para las/los psicólogas/os que deseen hacer carrera profesional como oficiales de la Guardia Civil. Algo parecido a una época anterior, cuando a principios de siglo existía la Escala Facultativa (ya extinta). Solo que ahora, primero se adquiere la condición de “mando” del Cuerpo, y es luego cuando se facilita que este personal se pueda desarrollar profesionalmente como psicólogo/a, puesto que tendrán la posibilidad de obtener destino en los diferentes Gabinetes del Servicio de Psicología.
Debido a las grandes oportunidades de movilidad que tiene el personal del Cuerpo, en la actualidad, varios Gabinetes del Servicio se encuentran sin cubrir, por lo que esta vía de acceso será una muy buena alternativa para incorporar nuevos psicólogos y psicólogas.
En su opinión de experto, ¿por qué es relevante que haya profesionales de la Psicología en el Cuerpo de la Guardia Civil?
Pues por lo enunciado en el preámbulo de la vigente Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que merece la pena citar textualmente: “Los funcionarios de policía materializan el eje de un difícil equilibrio, de pesos y contrapesos, de facultades y obligaciones, ya que deben proteger la vida y la integridad de las personas, pero vienen obligados a usar armas; deben tratar correcta y esmeradamente a los miembros de la comunidad, pero han de actuar con energía y decisión cuando las circunstancias lo requieran. Y la balanza capaz de lograr ese equilibrio, entre tales fuerzas contrapuestas, no puede ser otra que la exigencia de una actividad de formación y perfeccionamiento permanentes –respecto a la cual se pone un énfasis especial–, sobre la base de una adecuada selección que garantice el equilibrio psicológico de la persona”.
¿Qué profesionales mejor que las y los psicólogos pueden ayudar a que se cumplan estos mandatos de formación, selección y vigilancia del equilibrio psicológico de los agentes? Por el momento, en cuanto a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la Administración ha decidido que estos profesionales trabajen desde dentro de las propias organizaciones policiales, pero cabe la posibilidad de que en el futuro se externalicen algunos de estos cometidos.
Para finalizar, ¿desea añadir alguna otra cuestión de interés?
Solo recordar a los lectores interesados que estén atentos a las ofertas de empleo público que he citado, agradecer a las y los compañeros psicólogos de la Guardia Civil la función muchas veces silenciosa y no siempre suficientemente reconocida que desarrollan en beneficio del resto de compañeros y compañeras, y agradecer al Consejo General de la Psicología las facilidades para difundir esta especialidad de la Psicología en nuestro país.