El 12 de septiembre de 2012, la Oficina Regional de Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó una política sostenible para proteger y promover la salud de los europeos, especialmente de los grupos más vulnerables.
Esta nueva estrategia de política sanitaria global, denominada Salud 2020 (Health 2020), tiene en cuenta los principales desafíos que afectan actualmente al territorio de la Unión Europea, tales como el aumento de las desigualdades en la atención sanitaria entre los diferentes países, la reducción considerable de los servicios públicos debido a la crisis económica y el aumento significativo de la prevalencia de dolencias crónicas no contagiosas, entre las que se encuentran los trastornos de salud mental, el cáncer, la obesidad o las enfermedades cardiovasculares. |
Según el texto elaborado por la OMS, las políticas europeas en materia de salud deben sustentarse sobre tres pilares básicos: la inversión en la mejora de la salud de la población, teniendo en cuenta los cambios que se producen a lo largo del ciclo vital y la promoción de la autonomía; la adaptación de las políticas sanitarias a los cambios demográficos de la población y a los patrones actuales de enfermedad, «especialmente en lo que respecta a la salud mental, enfermedades crónicas y condiciones asociadas al envejecimiento»; y el fortalecimiento de los sistemas sanitarios, mediante una aproximación centrada en las personas y una adecuada capacidad de respuesta, que garantice una atención de alta calidad y basada en la evidencia. De esta manera, el texto reconoce la importancia crucial que juega la prevención de la enfermedad y la promoción de hábitos saludables en la población, a través de programas que promuevan la alimentación sana, el ejercicio diario o la reducción del consumo de tabaco y alcohol.
Asimismo, el cuidado de la salud mental de la población es otro de los aspectos que aborda la Estrategia europea. En el artículo 30, insiste en la necesidad de invertir esfuerzos en el fortalecimiento de los programas de promoción de la salud mental, dado que 1 de cada 4 europeos ha sufrido un trastorno mental a lo largo de su vida. Además, subraya la importancia de apostar por el diagnóstico precoz de los trastornos mentales, específicamente de la depresión y del riesgo de suicidio, debido a su creciente impacto en el entorno europeo.
A través de esta iniciativa, los expertos de la OMS pretenden movilizar a los responsables políticos de todos los sectores (sanitario, social, educativo ) para que sean conscientes de la importancia de proteger la salud física y psicológica de la población europea. Se trata del primer documento a escala europea que sitúa la promoción de la salud y la prevención como estrategias de actuación esenciales (al mismo nivel que el tratamiento y la rehabilitación) para combatir la incidencia de enfermedades en la población.
El documento puede descargarse en el siguiente enlace: