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Nuestra actividad laboral es parte de nuestro bienestar percibido y forma parte tanto de nuestras satisfacciones como de nuestras decepciones más personales. La frustración en el trabajo suele proyectarse sobre el ámbito privado y la satisfacción con el repercutir en los diferentes órdenes de la vida. Tarea habitual de la Psicología de la Salud Ocupacional ha consistido en analizar los riesgos y amenazas que afectan tanto a la salud como al bienestar en el trabajo. Una tarea pendiente es completar lo que sabemos sobre los aspectos nocivos del trabajo con el estudio de los aspectos saludables del mismo y su proyección sobre la vida en general. Diferentes perspectivas recientes que se encuadran en la Psicología Positiva Organizacional han propuesto modelos teóricos y procesos funcionales que exponen la contribución positiva del trabajo al desarrollo personal y de las organizaciones. Algunos de ellos se centran en elementos internos de la misma actividad laboral, como el compromiso laboral (engagement; Bakker, Schaufeli, Leiter y Taris, 2008) o en los estados de flujo (flow), otros se centran en la actividad externa al tiempo de trabajo, como el modelo de Recuperación (Recovery) o experiencias de recuperación (Sonnentag y Fritz, 2007) del contexto estresante laboral. | |||||
El modelo de Recuperación ha tenido en los últimos años un amplio desarrollo por su capacidad de explicación de la salud y el bienestar relacionado con el trabajo (Sanz-Vergel, y Sonnentag, 2013). La recuperación viene definida como un proceso de relajación psicofisiológica tras la exposición a una situación estresante laboral. Operativamente, se conceptualiza mediante cuatro actividades principales: distanciamiento psicológico, relajación, actividades de desarrollo y control del tiempo libre. De los cuatro componentes, la conducta de distanciamiento psicológico ha sido la más estudiada y la que parece tener mayores efectos positivos. Diversos estudios muestran que favorece los estados de bienestar psicológico a largo plazo, actúa negativamente sobre los estados de ánimo negativo, y modera numerosos riesgos psicosociales laborales como el conflicto trabajo-familia y el acoso laboral en el trabajo. La experiencia de recuperación no es una variable autónoma de la persona, no es completamente ajena al entorno y la carga laboral, sino que las condiciones laborales afectan a la misma capacidad de distanciamiento. La carga laboral no resuelta, y todavía más la no resoluble, afectan negativamente la capacidad de distanciamiento psicológico del trabajo. Por otra parte, el distanciamiento no afecta sólo al bienestar laboral sino que se extiende a la capacidad global de la persona de gozar del día a día. La satisfacción con la vida, entendida como una apreciación positiva de los logros y contenidos actuales de la propia vida, no es un resultado ajeno al ámbito laboral, aunque no sea una variable frecuentemente incluida en el estudio del bienestar en el trabajo. Lamentablemente, la mayoría de los estudios sobre el bienestar laboral y las diferentes variables que pueden configurarlo han sido realizados con una metodología transversal o de estudios de diario y focalizados exclusivamente en el análisis de las variables laborales. Por ello, la propuesta del presente estudio ha consistido en efectuar un estudio longitudinal de seis meses, con una muestra nacional de 600 trabajadores en la primera aplicación y 348 en la segunda, en el que se analizaron los efectos en el tiempo de las variables de distanciamiento, vigor, ansiedad y satisfacción con la vida. Objetivo complementario consistía en analizar no sólo los efectos temporales directos en este periodo de seis meses, sino también los inversos y recíprocos entre las variables predictoras y criterio a lo largo del tiempo, obteniendo de esta forma un modelo causal más complejo, dinámico y real.
En este sentido, los datos muestran una relación estrictamente recíproca entre la ansiedad y el distanciamiento laboral, señalando que ambas actúan recíprocamente en el tiempo, lo que no ocurre con el resto de variables. Los resultados globales del estudio muestran que, tanto de forma transversal como longitudinal, el distanciamiento psicológico del trabajo es beneficioso para el rendimiento laboral y para la satisfacción en la vida. En este sentido, el distanciamiento psicológico del trabajo parece actuar como un proceso de regulación del estrés laboral pero también como una estrategia de regulación emocional que beneficia la propia eficiencia personal. Como en la salud personal, física y mental, en la que los efectos de la conducta saludable no suelen ser inmediatamente observables pero que son claramente efectivos y reales en el medio y largo plazo, el distanciamiento psicológico del trabajo incrementa directamente el bienestar laboral y organizacional, y, a medio y largo plazo el mismo rendimiento del trabajador y la empresa. Aprender a distanciarse del trabajo es saludable y, por ello, cada vez más objetivo directo de la cultura organizacional (Sanz-Vergel y Sonnentag, 2013), y de alguna manera un valor de la misma. El artículo completo puede encontrarse en la Revista de Psicología del Trabajo y las Organizaciones:Moreno-Jiménez, B. y Gálvez Herrer, M. (2013) El efecto del distanciamiento psicológico del trabajo en el bienestar y la satisfacción con la vida: un estudio longitudinal. Journal of Work and Organizational Psychology, 29, 145-151 | |||||
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