La salud mental, un derecho básico de las personas mayores
10 Oct 2013
Como todos los años, el 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, un acontecimiento con el que la Organización Mundial de la Salud (OMS) pretende alertar sobre los desafíos y necesidades que plantea este ámbito de la salud. El tema elegido para este año 2013 es el de la salud mental en las personas mayores, una cuestión comúnmente dejada de lado, aunque esencial para alcanzar una buena calidad de vida en este periodo vital. A este respecto, la Federación Mundial para la Salud Mental (World Federation for Mental Health – WFMH) ha publicado el Informe Salud Mental y Personas Mayores (Mental Health and Older People), en el que argumenta las razones que justifican la necesidad de garantizar el bienestar psicológico de las personas mayores, así como proporciona información relevante sobre la presencia e impacto de los trastornos de ansiedad, la depresión o las demencias en este rango de edad, y que urgen a los gobiernos a diseñar planes eficaces de respuesta, debido al aumento de la población mayor en el mundo. | |||
Respecto a estos tres problemas de salud mental, la WFMH advierte:
Además de estos tres problemas de salud mental, la WFMH señala que las personas mayores pueden presentar también otros trastornos mentales propios de cualquier etapa de la vida, como el trastorno bipolar, el trastorno obsesivo-compulsivo, las adicciones y, aunque menos prevalentemente, la esquizofrenia. A este respecto, los autores del informe recuerdan que los síntomas psicóticos, como las alucinaciones o los delirios, pueden ser producto de determinadas enfermedades físicas, entre las que cabe destacar las demencias, las infecciones, los trastornos metabólicos u hormonales, los daños sensoriales o el abuso de sustancias. Tal y como defiende la WFMH, los gobiernos tienen la obligación y necesidad de adoptar medidas eficaces para promocionar la salud mental de las personas mayores. La salud mental no es una opción, sino un derecho básico de todos los ciudadanos, y especialmente, del colectivo de mayores. Los responsables de las políticas sanitarias deben ser conscientes de que si no se realizan acciones en esta dirección el envejecimiento de la población tendrá graves consecuencias en la fuerza de trabajo, en los sistemas de salud, en las redes de cuidados informales y formales, y, en definitiva, en el conjunto de la sociedad. | |||
Se puede consultar el documento en el siguiente enlace: Mental health and older people | |||