DROGAS, MUSICA Y JÓVENES: PREVENIR EN OTRA ONDA

14 Dic 2007

J. Guillermo Fouce y Mónica Fossoul

Psicólogos Sin Fronteras Madrid

Psicólogos Sin Fronteras Madrid (ONGD) viene desarrollando desde hace cinco años un trabajo de investigación sobre música, drogas y prevención en jóvenes. Desde el primer estudio, en el que se constató la existencia de abundantes referencias a la temática de las drogas en los diferentes estilos musicales, surge una línea de trabajo bastante innovadora en el tema de la prevención.

 

Basándonos en la importancia que tiene la música que escuchan los jóvenes en sus vidas (tiempo y dinero dedicados a la misma, frecuencia en las conversaciones, grado de identificación, etc.), y de la escasez de programas de prevención, debido quizá a las dificultades que existen para establecer una comunicación de calidad con este sector de la población, creamos un programa de prevención de drogodependencias al que hemos llamado «+Musik: Prevenir en otra onda», destinado a jóvenes de entre 14 y 18 años (edades de inicio de consumos).

Es esta la cuestión que afronta desde el primer instante +Musik: lograr un alto grado de comunicación con este sector de la población, adhesión al programa, motivación y algunos cambios significativos en consumos, utilizando su música, la de los jóvenes. Trabajar en prevención con elementos significativos para los jóvenes, en «su onda», es para nosotros un elemento metodológico fundamental si queremos resultar eficaces. Además, trabajando en el análisis de canciones y en dinámicas preventivas que usan la música conseguimos otros objetivos fundamentales en el plano educativo: aprendemos mientras nos divertimos, movilizamos emociones e imágenes que procesamos de manera automática sin aparente esfuerzo y reforzamos las intervenciones, pues éstas se repiten en el tiempo al seguir presentes las mismas canciones, especialmente cuando estamos hablando de un grupo o artista relevante.

Los objetivos sobre los que pretendemos incidir serían:

▪ Provocar un diálogo entre los adolescentes-jóvenes y los adultos, creando un clima de confianza mutua y prevenir el consumo de sustancias tóxicas, utilizando materiales cercanos y significativos para los jóvenes.

▪ Cambio y adaptación constantes a la luz del floreciente y extenso mercado musical actual.

▪ Aumentar las habilidades sociales de la población adolescente, sobre todo, la asertividad.

▪ Contribuir a crear un auto concepto sano en la personalidad del joven, como base a una autoestima adecuada.

▪ Mantener a los educadores en formación y reciclaje continuo, mediante la constante innovación del material utilizado, esto es, la música actual.

▪ Crear un marco de diálogo intergeneracional basado en la cultura, los modos y el lenguaje de los jóvenes.

A partir de estos objetivos, nos planteamos afrontar el reto de la prevención de drogodependencias en menores y jóvenes, teniendo en cuenta la necesidad de adaptar los programas e intervenciones a lenguajes, metodologías y contextos cercanos y comprensibles para los jóvenes. La prevención, si pretende ser eficaz, tiene que ser cercana, tiene que utilizar lenguajes y contextos juveniles, tiene que movilizar mediadores y modelos significativos para los jóvenes.

El programa de prevención consta de cinco ejes temáticos distribuidos en seis sesiones

▪ El primero denominado «¿En qué onda estás?», tiene como objetivo principal identificar los gustos y preferencias musicales de los jóvenes y evaluar su situación de partida con respecto a hábitos de consumo y de disfrute del tiempo libre.

▪ El segundo, bajo el título «¿Qué sabes de….?», está dirigido a ofrecer información sobre drogas y sobre las consecuencias legales asociadas a su consumo, posesión y tráfico, así como a identificar las creencias de los adolescentes a cerca del consumo de estas sustancias.

▪ El tercer eje, «Aquel día que me pasé», busca fomentar en la población adolescente una toma de conciencia realista sobre los riesgos asociados al consumo de drogas, reflexionar y promover una actitud crítica frente a los motivos que pueden llevar al consumo y dar a conocer las alternativas de ocio existentes.

▪ El cuarto bloque, denominado «¿Qué pasa conmigo?», tiene como objetivo reforzar estilos de vida saludables, favorecer la autoestima y el autocontrol, fomentar una actitud positiva ante la vida y entrenar a estos jóvenes en habilidades sociales.

▪ Y el quinto y último eje, «Y nosotros ¿qué podemos hacer?» (dimensión comunitaria) se lleva a cabo en dos sesiones y está dirigido a transmitir modelos positivos asociados a no consumo y proporcionar oportunidades prácticas de ejercicio de lo aprendido en el programa.

El programa ha dado lugar a una pagina Web www.masmusica.net en la que, entre otras informaciones, se pueden encontrar las campañas y canciones diseñadas por los jóvenes en la última de las sesiones preventivas.

El programa está dirigido a alumnos de tercero y cuarto de la ESO y primero y segundo de Bachillerato. En cada uno de los cursos escolares se trabajan estos ejes a través de una situación o narración diferente (lo que da coherencia al programa) y una sustancia concreta: según los cursos somos un grupo de música, estamos en un concierto, en la discoteca, o preparamos una fiesta. Y se trabajan: drogas en general (3º ESO), alcohol y tabaco (4º ESO), cannabis (1º bachillerato) y drogas de síntesis y cocaína (2º Bachillerato).

Los alumnos participantes en esta experiencia piloto pertenecen a un centro concertado de la Comunidad de Madrid. Fueron un total de 160 los jóvenes evaluados, siendo 85 de ellos aleatoriamente asignados a un grupo control y 75 a un grupo experimental.

Las variables que se tomaron en consideración fueron:

– Variables contextualizadoras y sociodemográficas.

– Variables preventivas: nivel de información con respecto a las drogas y utilidad percibida de esta información, percepción del nivel de consumo de alcohol con respecto a la media, intención de dejar de fumar e intentos para lograrlo, etc.

– Satisfacción con el programa, grado de aprendizaje y actitudes generadas, posibles mejoras que sugieren los participantes y aspectos que más satisfacción e insatisfacción les produjeron. 

Una vez desarrollado el programa y obtenidos los principales datos cuantitativos y cualitativos se podrían señalar las siguientes conclusiones generales:

1. El programa consigue resultados satisfactorios tanto en medidas subjetivas (satisfacción y aprendizajes) como objetivas: los jóvenes asignados al grupo experimental disminuyeron su consumo de alcohol y cannabis, así como las veces que la ingesta de alcohol desembocó en una borrachera. También aumentó considerablemente el número de alumnos que se plantean dejar de fumar y sobre todo los que perciben que en el tema de las drogas son más los riesgos que los beneficios.

Estos resultados preliminares muestran la potencialidad del programa como un instrumento útil y un propuesta eficaz en la prevención de drogas con jóvenes, no apreciándose, además, diferencias significativas en los resultados obtenidos en función de las distintas edades en las que se aplicó.

2. La música demostró ser un elemento motivacional y pedagógico muy útil en la conexión con los jóvenes. Además, es una fuente casi inagotable de referencias a diversos tópicos ligados a las drogas (consecuencias, contextos de consumo, motivaciones). Esto permite adaptar el programa a diferentes jóvenes en breve tiempo y lograr un elevado nivel de flexibilidad, actualidad y adaptabilidad de la propuesta.

3. Otro de los principios pedagógicos manejados que demostraron ser útiles y eficaces, tienen que ver con el aprendizaje de habilidades, conocimientos y actitudes en un contexto lúdico que facilita la adquisición de estas capacidades.

4. La interactividad y la interacción son elementos claves para obtener resultados positivos. Trabajar en prevención con jóvenes supone trabajar con sus aportaciones, sus opiniones, sus contextos, sus lenguajes, sus inquietudes,… Su participación activa es fundamental.

El artículo original en la que se basa esta noticia puede encontrarse en la revista Intervención Psicosocial: Fouce, J.G. y Fossoul, M.M. (2007).Prevenir en otra onda. Intervención Psicosocial, 16 (2), pp. 229-259.

Sobre los autores:

J. Guillermo Fouce Fernández

Mónica M. Fossoul Palicio

José Guillermo Fouce Fernández, es Doctor en Psicología social y cuenta con una amplia experiencia en trabajo integrado con drogodependientes. Así mismo es autor del programa «+Musik: Prevenir en otra onda».

Mónica M. Fossoul Palicio, es Licenciada en Psicología y miembro del Departamento de Orientación de un Centro Concertado de la Comunidad de Madrid. Es también autora del programa «+Musik: Prevenir en otra onda».

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